Natxo Allende

la comictiva

Por aquel entonces iba a todos los festivales de comic que había, Barcelona, Angouleme, etc. Y allí había gente que se autopublicaba sus comics. Entonces me dije, por qué no hacer un fanzine? Si, pero cómo?. La casualidad hizo que conociera a un estudiante de derecho, que me aconsejó pedir una subvención al Ayuntamiento de Bilbao para sacar mi primer número de La Comictiva, que así es como finalmente se llamó el fanzine. Para eso monté la Asociación de Comic de Euskadi. Una asociación cultural sin ánimo de lucro no exenta de polémica porque algunos dibujantes vascos dijeron que quién era yo y por qué había creado esa asociación sin consultarles. Yo solo quería crear algo que aglutinase a todos los dibujantes vascos, pero aquello fue imposible. Los odios y celos salieron a la luz y no hubo manera de hacer nada. En cambio, aproveché la coyuntura para sacar el fanzine. 

La alegría de ser subvencionado duró solo dos números, el resto tendría que ser yo el artífice que de donde sea pudiera sacar dinero para sacar un tercer número. Costó muchísimo pero lo saqué. Y después del número 3, vino el 4, el 5… y así hasta el número 20. 

La aventura duró 7 años y pasado un tiempo el fanzine se convirtió en revista. En los buenos años, llegó a vender 5000 ejemplares, y fue nominado a mejor Fanzine en el festival de comic de Barcelona y ganó un premio al mejor fanzine europeo en el Festival de Angouleme en Francia.

Las mala decisiones de marketing y ventas hechas, tras asociarme con las empresas editoras La Factoría de Ideas y después con Hilargi Ediciones, unido a que el maquetador se dedicara a otros menesteres y no pudiera trabajar más con el proyecto, hizo que la revista sucumbiera y no se pudiera publicar ningún número más.

El empujón definitivo fue que me dedicara al porno y viera un poco de luz en mi exigua y pobre economía. No me lo pensé dos veces, me volqué en internet y dejé para siempre la revista. No sin antes haber visitado a todas las editoriales de comic del país, pidiendo ayuda para sacarla adelante.

En 2001 La Comictiva dejó de publicarse y también dejé de dibujar.